ADN ruso

Los rusos tienen la característica que nadie sabe bien como son. Uno tenía la idea de que son fríos, medio locos, fuertes, serios y que también un mito cuenta que no sonríen. Todo eso es verdad, pero no tiene nada de malo. De fútbol no se si entienden tanto, por lo cual no se que tan contentos están de que el mundial sea en su país, pero seguro llevan con orgullo que Rusia sea el centro del mundo por un mes, y el trato con la gente lo tienen a mano.
El ruso es un idioma que nada tienen en común con el nuestro, apenas los gestos. No hablan español, no hablan italiano, y apenas hablan inglés. Es mentira que es difícil entenderlos a ellos, es imposible. Pero por suerte la comunicación no es sólo eso, y lo saben. Son sumamente agradables, aunque no les gusta que los molestes mucho o intentes hablar con ellos de cualquier cosa, pero ante algún inconveniente que tengas, ahí están para ayudarte. No te van a dejar a pata. Son serviciales y aunque no deben ni saber donde queda Argentina, nuestra bandera empieza con M, y es doble: Messi y Maradona. Como siempre, como hace más de treinta años.
Capaz nos conocen poco y al pasar los días se dan cuenta que el argentino medio, y encima de vacaciones, y NI HABLAR EN UN MUNDIAL, es agrandado, ventajero, le encanta mostrarse y si es posible, hacer un poquito de lio. Por eso somos el mejor país del mundo.


En una ocasión, tuve que hacer una conexión de subte y no encontraba la siguiente estación. Sabía para qué lado más o menos tenía que caminar y encaré. Le pregunté a un policía solamente una salida y ahí cerca, un ruso me escuchó. Se me acercó hablando en inglés y me dijo que lo siguiera. Caminando me contó que se llama Nickita o algo así, porque al contarle que mi nombre en inglés es John, él dijo: “el mío sería Nick”. Seguimos el trayecto de varias cuadras, yo no sabía si de verdad me estaba acompañando, si me había entendido, o si iba a terminar mirando el partido con él en algún lado. Tiene 34 años, vive con sus padres, estudia abogacía (se recibe luego del mundial) y trabaja en la universidad. A él le gusta el fútbol pero dice que en rusia en general hasta hace algunos años no era algo muy común. Para él ayudarme no fue un buen gesto solamente, define a los rusos como “friendly” y está super contento con los millones de hinchas que visitan su país, y su ciudad natal, Moscú. Caminamos, nos tomamos el siguiente subte y al acercarnos al destino, tanto el mío como el de él quedaban cerca, nos despedimos con un apretón de manos.

Les interesa mucho conocer otros gustos y culturas, y más que nada que vos te sientas cómodo y estés siempre en buenas manos. Puede pasar que sin consultarles, te ayuden. Son capaces de llamar taxis por vos o hacer alguna reserva e incluso caminar varias cuadras y desviarse, para que no te pierdas. El "manual" de AFA lo necesitamos nosotros, pero para nosotros mismos.

Hay un grupo de chicos, jóvenes, que trabajan como voluntarios de FIFA y se encuentran en las estaciones de metro, de trenes, aeropuertos, centros de las ciudades, puntos turísticos, Fan Fest y en los estadios. Ellos hablan inglés y algún otro idioma, y conocen de punta a punta todo lo que involucre al mundial y están predispuestos a colaborar en lo que sea, ya sea por una duda que tengas o porque te noten medio perdido. Además se encuentran todo el tiempo cantando, bailando y saludando a los hinchas de todo el mundo.



Hay cosas que uno siempre tiene que saber, y para venir acá aprendí las siguientes: ‘Gracias’ se pronuncia ‘spaziba’ y ‘por favor’ es ‘pashadusta’. La educación siempre va a ser la base de todo, eso no lo vamos a discutir. Bueno, cerveza se dice ‘pivvvva’, y también te abre grandes puertas.

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