El final
Se jugó el partido más importante del mundo. Ese que se juega cada cuatro años y solamente dos privilegiados tienen el placer de disputarlo. Ese que te da el poder de mirar al resto desde arriba aunque sea por un tiempo. Ese al que es tan difícil llegar. Tan difícil llegar para los que juegan, desde mi parte era cumplir el sueño de al menos, una vez en la vida mirar ese partido tan importante lo más cerca posible. Moscú. 15 de julio de 2018. Las puertas del Estadio Luzhnikí abrieron a las 14, pero la ciudad estaba tranquila. No parecía que se jugaba una final, que el mundial terminaba. Será porque ningún equipo sudamericano era uno de esos dos privilegiados, que eran Croacia y Francia. Fríos, como el clima que todos creíamos que iba a hacer en Rusia, algunos hinchas franceses caminaban tomando alguna cerveza, esperando la hora del partido. Por otro lado los croatas, que eran muchísimos más que sus rivales, algo más eufóricos. Era su primera final en la historia. Y en el medio